A través de los ojos de mi hija

A veces, necesitas parar, ver las cosas desde otra perspectiva, y saborear las merecidas vacaciones que te has ganado.

Al principio cuesta relajarse (demasiados días tiene el año con un ritmo arrollador, y si eres nerviosa, te cuesta el triple parar, tomar aire, y disfrutar del tiempo libre), pero intenta ver la vida a través de los ojos de un niño, verás como todo cambia y te ayuda a vivir el presente y no te estanca en el pasado, ni te hace soñar con lo que todavía no ha llegado (el futuro).
Creo que muchos necesitamos tomar esta perspectiva, a mi ayer me funcionó. Es lo que tiene estar de vacaciones sin Mr.A, que tienes tus 24h dedicadas a tu hija, y me fascina pero a veces es agotador, imagino que os pasará.
Tras un amanecer nublado y su ansia viva por irse al agua desde las 9am, decidí llevarla al parque (que todavía no quemaría), lo malo, que no estaba muy apto para niñas tan pequeñas asi que me tocaba formar parte del columpio, tobogán… y ¡qué divertido!
Me pasa que el primer día de vacaciones me cuesta horrores estar “sin hacer nada”, vivir cada día al máximo es lo que tiene (viajar, sacar tiempo para jugar, pasear al perro, cocinar, hacerte autosesiones de belleza y tiempo de calidad con Mr.A…) que cuando no tienes nada que te haga mirar el reloj, no sabes si se te hará pesado el día. Pero si algo e aprendido, es que es muy necesario no tener nada agendado y dejarte llevar, y ¡qué bien sienta!
Disfrutar de la vida a través de los ojos de la canija me está enseñando mucho. Volver a la infancia por algunos instantes haces que veas todo desde otra perspectiva, más divertida, sin estrés y con una mayor y mejor sonrisa.
Asi qe mientras sigo aprendiendo de ella, y de cómo no vivir estresada siempre, os recomiendo que observéis a vuestros hijos, sobrinos, primos pequeños… mirar cómo disfrutan de cualquier momento, centrándose en el AHORA, algo que los adultos olvidamos con frecuencia y dejamos pasar los segundos, minutos y horas, pensando en el ayer o en todo lo que vendrá después. Olvídate por un segundo de todo ello, y vive el presente. Cuesta, lo se, suelo olvidarme de ellos a menudo, pero si lo intentas día a día, te va saliendo sólo y sinceramente, la vida hay que vivirla al día o dejaremos que se nos esvape entre las manos como cuando intentas atrapar un pececillo en el mar.
Disfrutar de cada segundo a través de los ojos de mi bichito 💕 de lo mejor que intento hacer cada día.
unbaberoparamama.es

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