Hace casi 3 años que no me voy a cenar sola, y no es porque no pudiese porque Mr.A cuida de la canija de maravilla, es que me daba cosa.
Pero ayer tenía una cena, plan de chicas por un cumple, y me lancé.
Tenía que superar esa especie de «cosa»porque no era un miedo y no se muy bien cómo describirlo, y la verdad que me lo pasé fenomenal.
No tuve que mirar el móvil porque se que todos en casa estaban de auténtica maravilla, y disfrute, uy si disfruté… mogollón!
Fue una cena maravillosa donde conocí a unas mujeres de diez o más.
La tarde fue muy divertida, fuimos a un centro comercial para que la canija se tomase un helado de chocolate y madre mía, enterita para meter en la lavadora.
Llegar a casas, preparar cenas de mis amores, ducha express, vestirse e irse a pasar un buen rato.
¡Qué bien sienta superar esas «cosas» que a veces nos paralizan! Este propósito de año lo estoy cumpliendo fenomenal, y sienta de lujo, para qué negarlo 😉