Bienvenida fase 1.
Aquí estoy, tumbada en la cama de Casilda, mientras me cura con su kit de doctora, dice que estoy realmente mal, y yo me parto de risa.
Os preguntaréis porque casi a las 11:30 estoy encerrada en el cuarto de Casilda pudiendo ir a una terraza a tomar un café como tantísimo me gusta, pues veréis, hoy por fin ha venido el pintor y es lo que toca. Tres días más de confinamiento en un cuarto, pero no importa, no me importa vaya, porque es porque quiero, no porque me obliguen, y la cosa cambia, cambia mucho.
He aprovechado para limpiar a conciencia el baño, cosa que suele darme un pereza terrible pero tampoco tengo mucho más que hacer y hoy tocaba limpiar baños.
Luego saldré sin tocar nada al jardín con Casilda y Bali, a ver si así se despejan un poco. Bali está lloriqueando desde primera hora de la mañana (no le di su gran paseito y creo que lo necesitaba), y Casilda sólo quiere ir a la piscina. Pero todavía es pronto, no hay sol, y además si no a las 13h a saber qué hago con ella, que los juegos de agua se me están agotando al igual que en muchas ocasiones mi paciencia.
Disfrutad mucho de esta nueva fase, que pronto todo habrá terminado, o por lo menos eso espero.
Preparando el quinto podcast, pronto llegará…
Muchas gracias por pasaros por aquí,
¡hasta el siguiente post!
#MartaLopezBravo
